Magia muy participativa, el público es el verdaderos artífice del show.
Benjamín consigue que los invitados vuelvan a su infancia, crean en lo imposible, se ilusionen con lo irreal y participen como niños felices con sus amigos, donde el mago pasa a ser otro amigo.
Cada momento, cada juego, cada show será único e irrepetible.